martes, 14 de abril de 2009

El pensamiento débil

El "pensamiento débil" tiene la pretensión de resquebrajar tanto al que conoce, cuanto a lo conocido. Postula una modificación tanto del sujeto como del objeto del conocimiento y las relaciones del yo consigo mismo".

Sólo en muy raros momentos desea alguno de nosotros transportarse hasta aquel extremo de sí mismo en el que sabe bien que la propia identidad comienza a tambalearse, porque la correcta organización del yo no funciona ya como tal. Antes de llegar a ese punto, la pereza y el temor nos detienen, e impiden, incluso, que miremos en esa dirección. Hay que hacer un esfuerzo, es preciso poner entre paréntesis todas nuestras costumbres, si verdaderamente queremos aventurarnos a debilitar nuestro yo, apartándolo del ámbito de influencia de la lógica de superficie. Y después está el temor, el miedo ante lo que no nos resulta inmediatamente familiar, horror a descubrir realidades que puedan inquietarnos, a encontrarnos frente a accesos impracticables, que nunca podremos atravesar. Temor a que llegados a aquella orilla, de allí en adelante se extienda un vacío abismal.

Sin embargo, y al mismo tiempo, cada vez nos contentamos menos con una identidad cuyo carácter ficticio, provisional y de puro compromiso salta a la vista.

He aludido a una experiencia, narrada en forma literaria por Handke; el momento en que un individuo se ve forzado a realizar una transformación profunda. Sucede entonces que la lógica superficial demuestra lo obvia que es, y la observación de ese carácter trivial produce una sensación equiparable a la de la muerte.

Por tanto, hay algo de transitorio y de intermedio en la expresión "pensamiento débil". Provisionalmente encuentra un lugar entre la razón fuerte del que dice la verdad y la impotencia refleja del que contempla la propia nada. Desde esta zona intermedia puede hacer las funciones de un indicador.

Pier Aldo Rovatti , El pensamiento débil - Milán 1983


miércoles, 4 de marzo de 2009

Dejar a alguien o romper con una relación, es un evento que debiera darse bajo la total conciencia de que se está haciendo lo correcto, es decir, debiera ser tan conciente como se supone debió ser la decisión de unirse o de formar esa relación.
Cuando se renuncia, se debe a que ya no se está a gusto en dicha relación, por las causas que sean. Se supone que ya se ha intentado todo por salvarla, o quizás no, quizás ya no interesa salvar nada, se está harto y lo único que se desea es salir de tan lastimosa situación.
Pero entonces suele suceder que sobrevenga un sentimiento tan extraño como contradictorio o absurdo: la tristeza por abandonar.
Si se recapitula, se verá con honestidad que ya se intentó todo lo que ha estado al alcance por salvar la situación y mejorar la relación; o se verá que no interesa salvar nada. Sea cual fuere, está claro que no se puede ni se quiere seguir haciendo daño a si mismo ni dañando a otro, entonces ¿porqué sentirse triste?
El sentimiento está siempre estrechamente relacionado a un pensamiento, de ahí se sigue que entonces es el pensamiento el que juega una mala pasada; hay que aprender a ser realistas y objetivos, a contarse la historia tal cual es y no como gustaría que fuera; aprender pues a no decirse cosas lindas de una persona o una relación que en todo caso y a la luz de la objetividad, es verdaderamente perniciosa.
Este simple ajuste a la manera de concebir las cosas, signfica modificar el pensamiento, el pensamiento modifica al sentimiento. Pensar correctamente permite sentir correctamente.
Después, en vez de estar triste por haber tomado una decisión benéfica y saludable, en vez de ser absurdo e incongruente, se estará en posibilidades de organizar una fiesta para celebrar el haber tenido el acierto de dejar ir lo que perjudicaba nuestra existencia.


BrujoCurandero

miércoles, 25 de febrero de 2009

Quiero

Quiero que me oigas, sin juzgarme.
Quiero que opines, sin aconsejarme.
Quiero que confíes en mi, sin exigirme.

Quiero que me ayudes, sin intentar decidir por mi.

Quiero que me cuides, sin anularme.
Quiero que me mires, sin proyectar tus cosas en mi.
Quiero que me abraces, sin asfixiarme.
Quiero que me animes, sin empujarme.
Quiero que me sostengas, sin hacerte cargo de mi.
Quiero que me protejas, sin mentiras.
Quiero que te acerques, sin invadirme.
Quiero que conozcas las cosas mías que más te disgusten, que las aceptes y no pretendas cambiarlas.
Quiero que sepas que hoy, hoy puedes contar conmigo.
Sin condiciones.


Jorge Bucay

viernes, 20 de febrero de 2009

Respiración Esotérica

A través de las sesiones de Respiración Energética y de Psicología Espiritual o Pensamiento Creador, desbloqueamos el mecanismo respiratorio, llegando así a tener una respiración libre, y conseguimos deshacernos de los condicionamientos negativos que hemos hecho sobre la vida; así como de los patrones y las huellas que éstos han dejado impresos en nuestra memoria celular. También nos ayuda a liberar las toxinas, químicos, metales pesados etc. que pueden estar acumulados en nuestro cuerpo.

La RESPIRACIÓN es un ciclo de cuatro (4) ritmos:
INHALACIÓN, INTERVALO PRIMERO, EXHALACIÓN e INTERVALO SEGUNDO. En estos ritmos la acción del ALMA se alterna con la de la PERSONALIDAD.

"ALMA" es el Ser Divino en nosotros, del que provienen las fuerzas de los tres aspectos: de vivir, sentir y pensar. También se denomina: la TRÍADA.

"PERSONALIDAD" es el hombre físico con sus tres vehículos: etéreo, astral y mental. El que utiliza las fuerzas obtenidas del ALMA, es decir, el que mediante ellas vive, siente y piensa.

Cada ritmo tiene su propia naturaleza y significado. Veamos cada una separadamente. En la respiración actúa el ALMA. En la PERSONALIDAD el organismo físico.

1) INHALACIÓN: EL ALMA se acerca y transmuta sus fuerzas divinas a la PERSONALIDAD. Esta, por su parte, se mantiene pasiva y absorbe aquellas fuerzas. El vehículo de la PERSONALIDAD que más se vitaliza durante la inhalación es el etéreo. Este, si la inhalación es profunda y se hace con atención y aspiración, se abre literalmente a la afluencia de las fuerzas vitales, tanto que uno puede establecer contacto con el depósito de estas energías ("prana") y disponer de ellas para sus funciones. Uno, en realidad, conecta más estrechamente su vehículo etéreo a los centros de fuerzas. También los vehículos astral y mental se vitalizan por la inhalación; el grado de esta vitalización depende de la intensidad de la atención y aspiración del que respira. Combinando la inhalación con una aspiración mental intensa, podemos conectamos con una inagotable fuente de inspiración e iluminación. Por eso exclamó Nietzsche, al mencionar el origen de sus facultades extraordinarias: "Mi genio lo tengo en mis fosas nasales". Y esta es la razón por que el Maestro Tibetano señaló la inspiración profunda, como "la fórmula mágica de la vida creadora". Si uno desea aprovechar la afluencia de las fuerzas del ALMA en la inhalación, tiene que hacer tres (3) cosas: primero, debe pensar en la corriente de energías que entran, segundo, debe aspirarlas y finalmente llevarlas al centro de la cabeza. Pues el dominio de todas las fuerzas: mentales, astrales y vitales, está en la mente. Con las fuerzas del ALMA se formó primero en la evolución, el vehículo mental de la PERSONALIDAD, luego de éste, el astral y después el vital. Por consiguiente, el control primario de todas las manifestaciones siempre será la mente. Sabemos que una imagen mental intensamente constituida, se trasmite automáticamente hasta las células del cuerpo físico.

2) INTERVALO PRIMERO: Es la retención del aliento. Las fuerzas divinas del ALMA durante el ritmo de la inhalación, se transfirieron a la mente del hombre, donde en realidad, se formó un campo magnético de energías, pues el ALMA se manifestó por medio de la fuerza magnética. Como la acción del ALMA terminó y la de la PERSONALIDAD no empezó todavía, se produjo un momento de silencio, de equilibrio. LOS MOMENTOS DE EQUILIBRIO SON LOS MÁS IMPORTANTES EN LA PRÁCTICA ESOTÉRICA, porque son de verdadero poder. Justamente por esto, el primer intervalo de retención constituye la mejor oportunidad para formar el designio que uno desea realizar. Este designio puede ser de cualquier clase: como asunto de salud, fortaleza o hermosura del cuerpo, deseos personales, inspiración, intuición, etc.; pero siempre tendrá que revestirse por una imagen que lo represente, y habrá que expresarlo con palabras que se pronuncian mentalmente; como las imágenes mentales fácilmente resultan ser vagas, las palabras las determinan con toda precisión. La imagen mental formada y las palabras mentalmente expresadas, se magnetizan, se vitalizan en aquel campo magnético y llevan consigo la energía divina de realización. El Tibetano dice sobre esto: "ESTE MOMENTO DE RETENCIÓN ES EL INSTANTE, LA OPORTUNIDAD, LA OPORTUNIDAD QUE EL ASPIRANTE DEBE APROVECHAR. AQUÍ TENEIS UN INDICIO".

3) EXHALACIÓN: Es el ritmo en que la PERSONALIDAD lleva la parte activa, habiéndose retirado el ALMA. Si en los dos ritmos anteriores, todo lo que hicimos era puramente mental, en este ritmo empieza el trabajo efectivo. Pues, en la exhalación, la acción mental (imagen y palabras) se transmite automáticamente al sistema nervioso. Para apoyarla y dirigirla, tendremos que llevar la fuerza hacia el destino, que nos fijamos en el designio, Si se trata del cuerpo, tendremos que llevar la atención hacia aquel órgano o parte del cuerpo que queremos vitalizar. Las fuerzas nerviosas se dejan arrastrar por la atención. Si deseamos conectarnos con la fuente de inspiración, tendremos que mantener la concentración en la cabeza y extenderla sobre el asunto en cuestión, Si se trata de ayudar a una persona deberemos soltar y lanzar la forma mental hacia ella, y así en todos los asuntos. En este ritmo empieza el verdadero dominio sobre la fuerza nerviosa ("prana"). En los dos (2) ritmos anteriores no hemos trascendido la esfera mental, pero en este ritmo tenemos dominio completo y podemos arrastrar el prana hacia donde lo queremos. Por eso, su mayor importancia está en vitalizar cualquier parte del cuerpo o cualquier centro etéreo, El Tibetano dice: "El aliento exhalante, el cual si se hace con pensamiento y propósito sirve para desprender las formas mentales de sí . . . y sirve para vitalizar los centros . . . no necesito decir más".

4) INTERVALO SEGUNDO: Se produce nuevamente un silencio, la PERSONALIDAD terminó de actuar y el ALMA no empezó todavía, Vuelve el mismo equilibrio que en el intervalo primero, pero cambiando los roles: el campo magnético en la mente de aquel intervalo inducida por la acción del ALMA, se reemplaza en este intervalo por un campo de fuerzas formado en el sistema nervioso del que sabemos que fue provocado por la acción de la PERSONALIDAD en el ritmo antecedente. Todo lo que entra una vez en este campo, tiende a realizarse indefectiblemente en el cuerpo y mundo físico. Todo lo que tenemos que hacer en esta retención, es mantener fija la atención en el lugar a dónde la hemos llevado en el ritmo anterior. La atención centralizada al campo de fuerza del sistema nervioso y así asegura la realización. Es el tiempo del trabajo efectivo, en que el pensamiento produce acción por medio del cuerpo. El Tibetano dice sobre los intervalos en general: "ÚNICAMENTE DURANTE LOS INTERVALOS SE PUEDE HACER OBRA MÁGICA". Como se ve, en la práctica esotérica de respiración actúan dos factores: uno que es la respiración física, y otro que es el pensamiento y aspiración que agregamos. Hay que saber, que la segunda parte es la más importante. De la parte física nos servimos solamente por los momentos rítmicos de unión y desunión entre el ALMA y la PERSONALIDAD para hacer coincidir nuestro pensamiento con su ritmo. Si bien es cierto, que cuando más largos son los intervalos, por ejemplo, tanta mayor intensidad de magia realizadora concentramos, pero de ninguna manera debe uno esforzar la respiración física. Si esta no se desarrolla en forma natural y de un efecto benéfico para el organismo, lo hacemos mal y todo intento es en vano. No obliguemos a los pulmones a una inhalación profunda o a una retención larga, sino esperemos y dejemos que ellos solos instintivamente inspiren o se paren, y nosotros limitémonos únicamente a ayudarlos con nuestra voluntad.

El ALMA no trae el aliento de vida a la PERSONALIDAD para perjudicarla, sino para vivificarla, favorecerla. ¿Cómo podríamos conseguir resultados favorables si no actuamos con esta ley del ALMA?

EXISTE UNA PRACTICA ESOTÉRICA DE RESPIRACIÓN MAS ELEVADA AÚN, que no busca resultados físicos, sino solamente MAYOR PERFECCIÓN Y MAYOR UNIÓN con el ALMA. Su esencia consiste en cambiar la segunda parte: en vez de pensar y aspirar siguiendo la corriente de inhalación, la práctica se hace al revés:

Para entenderla bien, hay que conocer la idea fundamental que la guía: se considera que el que realmente vive y respira es el ALMA, y la PERSONALIDAD no es otra cosa que su reacción densa solamente. Es decir, sus ritmos son contrarios como lo son la acción y la reacción:

B) cuando el ALMA inhala.............................. la PERSONALIDAD exhala.
A) cuando el ALMA exhala............................. la PERSONALIDAD inhala.

Los intervalos, igualmente como en el sistema anterior, son puntos efectivos de contacto entre los dos, o sea, son los momentos en que la PERSONALIDAD puede captar la fuerza del ALMA.

Conforme a esta idea, la práctica esotérica superior consiste en pensar y aspirar con el ritmo propio del ALMA. Se empieza con la exhalación física:

Cuando mi cuerpo exhala, pienso en inhalar y aspiro la corriente de fuerzas divinas, es decir, me identifico con el ALMA y quiero seguir sus pulsos, llevando la corriente al centro de la cabeza. Es obvio que su efecto debe ser fuerte; la fuerza exhalante física vitaliza, magnetiza el centro de la cabeza y la fuerza inhalante aspirada tiende a colocarlo bajo el control del ALMA.

En el intervalo formulo el designio en la misma forma, como antes, con la diferencia que en este caso el designio es siempre un asunto espiritual.

Cuando mi cuerpo inhala, pienso en exhalar, en el acto del ALMA que comunica a la PERSONALIDAD la fuerza creadora, con la cual busco unir el asunto del designio,

El intervalo después de la inhalación física lo empleo para mantener firme mi atención en el asunto, para su realización.

Es evidente, que es el camino hacia la más rápida unión con el ALMA.

UN EJEMPLO PRACTICO: Supongamos que tengo un defecto en el hablar, que me perjudica mucho en mi carrera y ambiente social, por consiguiente, mi designio será: "Quiero llegar a la facultad perfecta de hablar"
Los pasos prácticos a seguir son:

a) DURANTE LA INHALACIÓN:
Pienso y aspiro las fuerzas creadoras del ALMA y las llevo al centro de la cabeza. La aspiración la hago con mucha intensidad.

b) EN LA RETENCIÓN:
Digo mentalmente con convicción y a la vez me lo imagino vivamente en la cabeza: "Siento, como surgen en mí las fuerzas creadoras del ALMA, de habla perfecta". Y lo digo y lo imagino tantas veces, cuantas permite la retención sin esfuerzo.

c) DURANTE LA EXHALACIÓN:
Conjuntamente con el impulso de exhalación física hago un esfuerzo grande de voluntad e impelo la imagen y la convicción mental hacia los órganos del habla (laringe, lengua, boca).

d) EN LA RETENCIÓN SEGUNDA:
Mantengo ahí la firme convicción durante toda la retención, y siento la acción benéfica de las fuerzas del ALMA que actúan en los órganos de hablar.



BrujoCurandero


domingo, 1 de febrero de 2009

La Crítica


La crítica es solo crítica. No existe tal cosa como la "crítica constructiva" o la "crítica destructiva".

Cuando alguien critica a otro, se suele justificar diciendo: "es crítica constructiva". Lo hace para que el otro no se sienta agredido, claro; pero aquí, en este sitio, el fin es reflexionar sobre esas figuras semánticas que son de uso coloquial y que a lo largo de todo un proceso histórico han ingresado en nuestro lenguaje cotidiano hasta convertirse en verdades, agazapadas en la falta de reflexión y cuidado de nuestros pensamientos y palabras. Tal es el caso de palabras y frases como: "le hice una crítica constructiva" o "lo que me dijo me hizo sentir..." La segunda se refiere a lo que se suele decir ante la crítica, máxime cuando esta es a título personal.
Sin embargo, repito, la crítica es sólo crítica. Que sea constructiva o destructiva depende del receptor o depositario de la misma, no del emisor. Este puede, si quiere, imprimirle toda la mala fe posible a su crítica, lo cual será percibido por el receptor y lo notará por la entonación, la inflexión de la voz, los gestos y ademanes de aquel; pero que quede claro que el contenido es lo que constituye la crítica, lo demás es actuación, no debe importar, pues en realidad solo está emitiendo una opinión subjetiva; luego entonces no vale la pena pervertirse o corromperse por ello. Las opiniones son solo eso y por lo general, no son importantes, salvo cuando se ingresa al mundo del consumismo y se depende de la opinión o la crítica para el desplazamiento del producto que se comercializa. Pero ¿qué decir de la crítica amable? Lo mismo, es solo otra opinión, con una entonación diferente pero igualmente subjetiva y sin importancia, con la misma salvedad arriba expresada.
Cuando decimos que alguna opinión o crítica "nos hizo sentir..." estamos depositando nuestra responsabilidad en el otro, en el que emitió su crítica o su opinión. Eso, nos habla de una mala auto-estima y de inmadurez.
En el mundo de los adultos deberíamos ser maduros y permitirnos ser libres, aunque solo fuera para opinar y/o criticar. Libres y maduros también para asimilar la crítica. Nada nos obliga a tomarla en cuenta, a menos que dependamos de ella para colocarnos en el mercado. Aunque, si tal fuese el caso, seguramente estaríamos usando la mercadotecnia para hacer que a través de la publicidad, la opinión y la crítica nos fueran favorables.
Entonces tenemos por una parte a la crítica y a su emisor, y por otra, a la misma crítica y al receptor. Y como en todo lo que involucra a dos elementos que interactúan entre sí, debemos distinguirlo para conciliarlos.

En este caso, la conciliación aparece cuando somos lo suficientemente maduros para aceptar la crítica de la índole que sea; pero también cuando somos capaces de criticar sabiendo que solo estamos dando nuestra opinión y que esta, suele no importar. Aun cuando pueda ser importante.

Brujo Curandero.

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miércoles, 28 de enero de 2009

Profundo y Superficial

"En lo superficial está lo profundo, en lo profundo está lo superficial".
No recuerdo dónde leí esta frase, acaso no la leí así exactamente, pero en todo caso, la idea era esa. Yo he notado que cuando se trata de temas profundos desdeñamos aquello que consideramos superficial y, de la misma manera, a la cotidianidad, la consideramos sin importancia, precisamente por carecer de profundidad. Sin embargo, atendiendo a la frase inicial, quizá reflexionando un poco sobre ella, podemos considerar que ambas palabras, expresan solo un estado de conciencia, el acceso epistémico que se tiene hacia lo uno o lo otro, como el antes o el después en una línea del tiempo, olvidándonos de que el tiempo así medido, no existe, salvo como una referencia para el ser humano, pero científicamente no hay diferencia entre el antes y el después. Así, tampoco existe una diferencia entre lo profundo y lo superficial, pues ambos estadios coexisten en la concepción de quien los distingue, solo falta que los concilie y reconozca que, de facto, están conciliados en su ser.

Cuando somos superficiales, estamos dejando ver al mismo tiempo la estructura psicológica y la formación cultural sobre la que se sustenta dicha superficialidad, luego entonces, estamos siendo profundos. Así también cuando pretendemos ser profundos, estamos haciéndolo a través de la comunicación coloquial, ora docta, que expresamos con nuestro cuerpo físico, con nuestro lenguaje, más o menos ignorante o bastante ilustrado, pero formal, es decir, en el mundo de la forma; luego entonces, superficial.

De ahí que yo piense que, lo importante no es ser profundo o superficial, sino ser genuino, es decir, ser lo que realmente se es, ser conciente de sí mismo, sin más pretensiones, sin ánimos protagónicos, ser natural, en contínuo contacto con uno mismo, reconociendo que en mí se resumen lo uno y lo otro y que, a pesar mío, se manifiestan al mundo de la única manera posible: mi lenguaje en todas sus formas.
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Brujo Curandero

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domingo, 18 de enero de 2009

Todos deseamos ser amados,
en su defecto, ser admirados,
en su defecto, ser temidos,
en su defecto, ser odiados y despreciados.

Deseamos despertar una emoción
en quien quiera que sea el otro.

El alma se estremece ante la vida y busca
el contacto, sin importar a qué costo.

Hjalmar Söderberg
Poeta Sueco